Pulso Latino celebra su primer año de actividades

Sandra Guerra y David Zalapa bailan en el aniversario de Pulso
Latino, de la que son directores, el sábado 24 de febrero

“Papá, ¿cómo se vio? ¿Lo hicimos bien?”.

“Sí, hija; muy bien”.

La velada a la que convoca Pulso Latino tiene mucho de reunión familiar. Ahí están papás e hijos, pero también hermanos, abuelos y buen número de amigos, que conmemoran un año de actividades de la academia, ubicada en la colonia Bojórquez.

Eduardo Solís y Rosa María Ramírez
Es la noche del sábado 24 de febrero en el local del Sindicato Nacional de Trabajadores de Hoteles y Restaurantes. Los espectadores toman asiento en sillas que en la pista dejan espacio para la acción. El director de Pulso Latino, David Zalapa Requena, da la bienvenida al público con un mensaje en que agradece el apoyo de los padres, pero sobre todo a los alumnos de la escuela, que abrió sus puertas el 16 de enero de 2017 con clases de salsa y bachata, a las que meses después se añadieron jazz, hip hop, danza aérea, chacha, cumbia y tango, y que en breve sumará danzas polinesias y contemporánea.

Esos ritmos conforman el programa de la celebración, que, al concluir las actuaciones, se extiende con baile social. Diferentes experiencias y edades están representadas, pues bailan tanto profesores como estudiantes, y desde chicos que están en la primera decena de vida hasta adultos mayores que contagian la energía de su movimiento.

Alumnas de salsa de Pulso Latino
Es también noche de sorpresas: cerca del final, David y Sandra Guerra, subdirectora de Pulso Latino, hacen pareja en la pista y, sobre una grabación sonora, se escuchan las notas interpretadas en vivo por el violinista Antonio Cisneros. La experiencia se repite como último número de la velada, anterior a la despedida de todos los bailarines siguiendo los movimientos del director.

David dice que la intención de Pulso Latino es ser “una academia que trascienda en el Estado con un concepto nuevo y combinando estilos que la hagan atractiva”. “Nuestra idea”, afirma, “es seguir creciendo y demostrar que los géneros dancísticos no están tan separados unos de otros”.

Britany Cetina, alumna de danza aérea
Keily Romero, alumna de jazz
Lyn Munro Hurd y David Zalapa Requena



Ángel Romero, alumno de jazz

Alumnas de Pulso Latino



Alumnas de jazz de Pulso Latino

El grupo Cavour




Alumnas de salsa, nivel intermedio



Karla, maestra de danzas polinesias



Eduardo Solís y Rosa María Ramírez


Alumnos de salsa de nivel intermedio

David Ávalos y Claudia Quintal

Jéssica Córdova, maestra de jazz

Sol Gamboa y Josué Baas, en un
número de tango


Raquel Rivadeneyra, maestra
de danza aérea



Grupo de jazz del maestro Alan Zalapa




David Zalapa y Sandra Guerra actúa con acompañamiento
musical del violinista Antonio Cisneros



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