David Zalapa: "Quisiera que la salsa se viera como una disciplina que requiere mucho entrenamiento"

David Zalapa con los trofeos y medallas
obtenidos por Proyecto Amitié
Hay bailarines que hacen sus sueños realidad. Como David Zalapa Requena. Literalmente.

David en la academia Pulso Latino
El bailarín de salsa soñó un día el orden de participación y la coreografía que él y los demás integrantes de Proyecto Amitié presentarían en el concurso Euroson Latino de 2014, el año en que por tercera ocasión fueron campeones. Y así lo vivieron. El azar, en el primer caso, y la voluntad de cumplir el dictado de la ensoñación, en el segundo, materializaron la proyección nocturna.

El sueño, sin embargo, no le revelaría que ese año el grupo tendría que comenzar un paréntesis en sus participaciones en el certamen debido a problemas de salud y compromisos personales.

Antes de unirse a Proyecto Amitié, David ya había recibido reconocimientos por su desempeño individual y en pareja en el concurso “Mérida baila”, en el que en 2009 fue considerado el mejor intérprete masculino y en 2010 ganó junto a Ixchel Martínez el primer lugar del certamen.

La danza fue un hallazgo algo tardío para David, quien a los 17 años entró al Centro
Proyecto Amitié: Pastor Uicab, David Zalapa,
Pedro Pablo Parra y Alan Zalapa. Foto: cortesía
Estatal de Bellas Artes a estudiar ballet, que descubrió cuando Emmanuel Gutiérrez, su compañero de clases en la preparatoria, lo citó en esa escuela para acordar su participación en la coreografía de una fiesta de 15 años. Después, en la academia de Edwel Cetina aprendió jazz y hip hop.

El vídeo en que un bailarín amigo presentaba un número de salsa en línea lo motivó a preguntar por ese género, que le llamó la atención “porque tenía muchos pasos, trucos y cargadas, y dije: ‘Yo quiero hacer eso’”. Su amigo le enseñó unos cuantos movimientos y cuando el maestro Ricardo Ruz, director de Spassio Latino, lo vio en acción lo invitó a ser parte del grupo de baile de la escuela.

David con los trofeos conquistados por Proyecto Amitié
“Empecé a bailar, a bailar, a bailar; pero por cuestiones familiares dejé de ir a la academia dos años”. Cuando lo retomó fue para participar en los certámenes de “Mérida baila”. En una de esas ediciones fue jueza la maestra Graciella Torres Polanco, quien “me dijo que le había gustado mucho cómo bailaba, que de todos los que habían competido era el único que definía los géneros que ponía” y lo invitó a presentarse en otros eventos y apoyó la realización de programas como “El chachachá se baila así” con que Spassio Latino expuso la evolución histórica del baile en Mérida y México.

También respaldó la participación de David en el Euroson Latino de 2011 en Puebla, con Ixchel como pareja. A partir del siguiente año y hasta 2014 David asistiría con Proyecto Amitié, en la categoría Team Shines (de pasos libres). La creación del grupo fue una idea de Pastor Uicab y para conformarlo se eligieron no sólo ejecutantes de salsa, sino también a uno experto en hip hop y ballet. Al final quedaron Pedro Pablo Parra Paz, José Luis Rincón, Pastor, y David y su hermano Alan. “Nadie daba nada por nosotros y, oh sorpresa, impactamos”, recuerda. “Nunca un grupo de sólo yucatecos había ganado la competencia”.

De vuelta en la entidad comenzaron a prepararse para la edición de 2013. “Comenzamos a
recibir críticas de la gente de aquí y de fuera, (decía) que tuvimos mucha suerte… Eso nos produjo un desbalance. Luis Quintal Durán, entrenador deportivo, nos ayudó mucho en la cuestión psicológica. Él nos motivó, nos hizo ver que nada es suerte, todo es por trabajo, esfuerzo, dedicación”. Ese año (ya eran sólo cuatro, por la salida de José Luis) “llegamos a Euroson con otro tipo de energía, no sólo de amistad, sino que teníamos fe en cosas más fuertes”.

Su tercer campeonato lo conquistaron en 2014. “Metíamos hip hop en el centro del baile, fuimos los primeros en meter (movimientos de) robots”, explica.

“Tuvimos tres campeonatos nacionales seguidos. Nadie más de Mérida lo ha logrado. Este año volvimos a formar el grupo, estamos trabajando para competir en junio en varias categorías”.

Al certamen también asistirían esta vez alumnos de Pulso Latino, la academia que David –después de trabajar en varias escuelas– abrió el 26 de enero pasado en la colonia Bojórquez (calle 59-H entre 102 y 104) y donde se dan clases de salsa, bachata, jazz y hip hop. La plantilla docente incluye asimismo a Sandra Guerra (actualmente pareja de baile de David), Alan, Pastor y Pedro Pablo.

“Mi idea es no sólo enseñar salsa, sino dar una formación integral, porque un bailarín tiene que tener todo el aprendizaje posible. A Jorge Martínez (oaxaqueño, campeón mundial de salsa y director de Salsa Na’ Ma) lo menciono mucho porque cuando fui a Oaxaca (en respuesta a la invitación de entrenar con él durante tres semanas) me dio hospedaje en su casa para que no gastara mucho dinero, porque valoraba que viniera desde tan lejos a aprender. Lo único que me pidió fue que, así como él tuvo la humildad de enseñarme, si hubiera una persona que tuviera muchas ganas de aprender, pero no las posibilidades, yo le enseñe. Yo pasé por lo mismo. Si puedo compartirlo con ellos, ¿por qué no?”.

David es también organizador del evento “Unidos por la danza”, que surgió en 2012 para recaudar fondos con los cuales viajar al Euroson Latino. “Se me ocurrió: ¿por qué no hacemos algo donde podamos unir la danza para que se pueda cumplir ese tipo de sueños, invitemos a las academias a presentar su trabajo y nosotros mostremos a la gente lo que hacemos para que sepa que vamos a competir por el Estado?”. Y ahora “cada año se quieren sumar más academias”, no solamente de Mérida, sino también de municipios como Ticul y Tixkokob.

Él también apoya los eventos a los que le invitan para compartir experiencias,
Al concluir el Euroson Latino de 2012
porque “quisiera que la salsa se viera como una disciplina dancística que requiere mucho entrenamiento”.

“Cuando mis papás se enteraron que bailaba fue un show, de hecho nunca pensé dedicarme a dar clases; pero fue tanto lo que me gustó... ¿Sabes qué me gusta mucho? Cuando alguien dice que no puede y logro que lo haga. Porque hay gente que llega diciendo que nunca ha bailado en su vida. Yo también, pero aprendí. Puedes hacer de esto un reto, algo que va a hacerte mejorar. A la mayoría le mejora en muchas cosas emocionales: la hace más segura, sociabiliza más… El ambiente salsero es sano”.



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