Karla Paola Lastra: “He estado en el momento correcto y en el lugar correcto”

Karla Paola Lastra Zapata como Kitri en la función de
estreno de "Don Quijote" por el Ballet de Jalisco, el viernes
23 pasado en el Teatro Degollado de Guadalajara. Foto:
Ballet de Jalisco / Gabriela Ruiz Dana

Un curso al que asistió en 2010 en Ciudad de México convenció a Karla Paola Lastra Zapata de que quería dedicarse de manera profesional al ballet. “Me encantó la idea de que mis días fueran totalmente dedicados a la danza. Fue un curso como de 9 a 2 de la tarde y me encantó el hecho de que mi ‘responsabilidad’ del día fuera bailar”, recuerda la bailarina campechana, de 25 años y quien desde hace tres es integrante del Ballet de Jalisco.

Pero el camino que la llevaría hasta ahí no lo encontró enseguida.

En "Who Cares?". Fotografía: Ballet de
Jalisco / Shoot Dance

Al terminar la preparatoria, sus papás, Carlos Alberto Lastra del Rivero y Verónica Zapata Castillo, le preguntaron qué quería hacer en adelante y ella les respondió que bailar. “Pero no sabía qué se necesitaba para llegar a ser bailarina profesional. Me habían ofrecido una beca (para hacer estudios) en docencia en el CNA (Centro Nacional de las Artes), en México. Mis padres me preguntaron si iba a aceptarla y mi respuesta inmediata fue: ‘No, yo no quiero dar clases, quiero bailar’”.

Ante ese panorama decidió comenzar una carrera en un campo diferente de las artes: Administración de Empresas Turísticas. La cursó sólo cuatro cuatrimestres, porque en el otoño de 2010 el naciente Ballet de Cámara de Quintana Roo (ahora Compañía de Danza Clásica de Quintana Roo) abrió a la graduada de la Escuela Superior de Danza “Ana Rosa Cáceres de Baqueiro” de San Francisco de Campeche la puerta para conseguir su objetivo como bailarina.

En los dos años y ocho meses que perteneció a la agrupación (hasta julio de 2013) “bailé

En "Romeo y Julieta". Foto: Ballet de Jalisco /
Gabriela Ruiz Dana

muchísimo”. Interpretó el papel protagonista en dos de las representaciones de “Carmen” con que la compañía empezó sus actividades y en las que “bailamos con la Orquesta (Sinfónica de Quintana Roo) en Cancún, Cozumel y Chetumal”.  En galas posteriores –Mérida estuvo entre los lugares de visita– actuó en duetos de “Don Quijote”, “El Corsario”, “El Cascanueces”, “El lago de los cisnes” (Cisne Negro) y “Diana y Acteón”; en el “Tchaikovsky Pas de Deux” y en coreografías grupales.

“Un día un amigo llegó con la noticia de que se abriría una nueva compañía en Jalisco y que el director sería Dariusz Blájer”, recuerda Karla. Aunque al principio rechazó la idea de audicionar, durante unos días analizó qué sucedería si se mudaba a Guadalajara. “Justo el último día para mandar los papeles nos animamos a ir mi novio y yo, dijimos que no perdíamos nada con probar”.

En "Scheherezade". Fotografía: Ballet de Jalisco

En la capital de Jalisco se enfrentó a “la audición más larga de mi vida”, con clases para mujeres y varones, ejercicios de pas de deux y ejecución de una variación. “La audición fue un sábado y el lunes ya teníamos respuesta por mail. Me emocioné muchísimo porque decía que había sido aceptada y una de las tres de mayor puntaje”. Su primer día en la compañía fue el 16 de agosto de 2013.

Karla con Norman Barrios, como Basilio, en "Don Quijote".
Foto: Ballet de Jalisco / Gabriela Ruiz Dana

“Estoy encantada en el Ballet de Jalisco, me recibieron muy bien tanto mis maestros y directores como el público tapatío. Considero que he crecido tanto técnicamente como artísticamente pues me ha tocado bailar mucho, gracias a Dios”. Al “trabajo, dedicación y constancia” atribuye el lugar que se ha ganado en la compañía y que la ha llevado a interpretar pas de deux como los de “Muñecos”, de Alberto Méndez; “Aguas primaverales”, “Flamas de París” y “La bailarina de papel y el soldadito de plomo”, del yucateco Aldo Kattón, además de ser incluida en el elenco de “Who Cares?”, de George Balanchine.

Ha intervenido también en representaciones completas de “La Bella Durmiente” (en los papeles de Aurora, Caperucita Roja y el Hada del Poder y en el pas de deux del Pájaro Azul), “El Cascanueces” (Clara, el Hada de Azúcar, la danza china y como copo de nieve solista), “Romeo y Julieta” (la gitana principal), “Don Quijote” (Kitri) y “Scheherezade” (“uno de mis más grandes orgullos” y en el que tuvo el papel protagonista). 

En "Baile de graduados". Fotografía: Ballet de
Jalisco / Shoot Dance

En esta compañía, que en octubre traerá “Don Quijote” a Mérida como parte del Festival Internacional de la Cultura Maya, Karla aspira a “ser mejor bailarina cada día, busco perfeccionar mi técnica, la interpretación para cada personaje, porque no dejamos de ser actores”.

“Quisiera ser reconocida a nivel nacional estando en el Ballet de Jalisco. No quiero necesitar estar en Ciudad de México para que la gente sepa quién soy”.

De Dariusz Blájer opina que “es un excelente director y haber estado en Ciudad de México (encabezando a la Compañía Nacional de Danza) lo llenó de mucha experiencia para dirigir una agrupación como ésta; ha llevado muy bien el crecimiento de este Ballet, pues es la tercera compañía hecha en Jalisco y es la que ha durado más y ha sido más sólida”.

En "Scheherezade". Foto: Ballet de Jalisco

Considera que para que en los estados de la Península exista una agrupación como la de Jalisco se necesita “mucho apoyo por parte de la Secretaría de Cultura, si es quien la mantendrá, y un director preparado con experiencia”.

¿Alguna vez has deseado no haber tomado este camino?

“No, nunca; lo único que a veces me pregunto es si sería mucho mejor si hubiera iniciado el entrenamiento profesional antes o si hubiera estudiado en una escuela profesional como el CNA o en el extranjero. Pero por algo pasan las cosas y creo que he estado en el momento correcto y en el lugar correcto aprovechando la oportunidad presente”.

Este artículo fue actualizado el 15 de octubre de 2016.